Que hubo antes del big bang

qué había antes de la singularidad inicial

El Universo no ha existido siempre. Nació. Hace unos 13.820 millones de años, la materia, la energía, el espacio y el tiempo surgieron en una bola de fuego llamada Big Bang. Se expandió y, a partir de los restos que se enfriaron, se formaron galaxias, islas de estrellas de las que nuestra Vía Láctea es una entre unos dos billones. Esta es la teoría del Big Bang.

Un universo surgido de la nada es tan descabellado que los científicos tuvieron que ser arrastrados a la idea. Pero las pruebas son convincentes. Las galaxias se desprenden como trozos de metralla cósmica. Y el calor del Big Bang sigue a nuestro alrededor. Enfriado en gran medida por la expansión cósmica, este “resplandor” no aparece como luz visible, sino principalmente como radiación de microondas, la “radiación cósmica de fondo”, que fue descubierta por los radioastrónomos en 1965.

Cuando un cartucho de dinamita explota, la detonación se produce en un lugar y la metralla vuela hacia el vacío. En el Big Bang, no había centro ni vacío preexistente, por lo que no se produjo en ningún “lugar”. El espacio mismo surgió y comenzó a expandirse por todas partes a la vez.

cuándo fue el big bang

Reconozcámoslo: pensar que el universo tiene una historia que comenzó con una especie de cumpleaños hace unos 13.800 millones de años es extraño. Resuena con muchas narrativas religiosas que postulan que el cosmos fue creado por intervención divina, aunque la ciencia no tiene nada que decir al respecto.

Si todo lo que ocurre puede atribuirse a una causa, ¿qué causó el universo? Para abordar la difícil cuestión de la Primera Causa, los mitos religiosos de la creación utilizan lo que los antropólogos culturales llaman a veces un “Ser Positivo”, una entidad sobrenatural. Dado que el tiempo mismo tuvo un comienzo en algún momento del pasado lejano, esa Primera Causa tuvo que ser especial: tuvo que ser una causa no causada, una causa que simplemente ocurrió, sin nada que la precediera.

Atribuir el comienzo de todo al Big Bang plantea la pregunta: “¿Qué ocurrió antes de eso?”. Esa es una pregunta diferente cuando se trata de dioses eternos, ya que para ellos la intemporalidad no es un problema. Ellos existen fuera del tiempo, pero nosotros no. Para nosotros, no hay un “antes” del tiempo. Por lo tanto, si se pregunta qué ocurría antes del Big Bang, la pregunta carece en cierto modo de sentido, aunque lo necesitemos para que tenga sentido. Stephen Hawking lo equiparó una vez a preguntar “¿Qué hay al norte del Polo Norte?”. O, como a mí me gusta expresarlo, “¿Quién eras antes de nacer?”.

¿existe el tiempo antes del big bang?

Términos como “Universo en expansión”, “big bang”, y “singularidad inicial”, son hoy en día parte de nuestro lenguaje común. La idea de que el Universo que observamos hoy se originó a partir de una enorme explosión (big bang) es ya bien conocida y ampliamente aceptada, a todos los niveles, en la cultura popular moderna. Pero, ¿qué ocurre con el Universo antes del big bang? ¿Y tendría algún sentido plantearse esa pregunta? De hecho, los recientes avances en física teórica, y en particular en la Teoría de Cuerdas, sugieren respuestas a las preguntas anteriores, proporcionándonos herramientas matemáticas capaces, en principio, de reconstruir la historia del Universo incluso para tiempos anteriores al big bang.

En el escenario cosmológico emergente, el Universo, en la época del big bang, en lugar de ser un “bebé recién nacido” era en realidad una criatura bastante “envejecida” en medio de su evolución, posiblemente infinitamente duradera. El objetivo de este libro es transmitir esta imagen en un lenguaje no técnico y accesible también a los no especialistas. El autor, que es un destacado cosmólogo, llama la atención sobre las observaciones actuales y futuras que podrían revelar reliquias de una era anterior al big bang.

¿qué no existía antes del big bang?

En 1981, muchos de los principales cosmólogos del mundo se reunieron en la Academia Pontificia de las Ciencias, un vestigio de los linajes acoplados de la ciencia y la teología situado en una elegante villa en los jardines del Vaticano. Stephen Hawking eligió el augusto escenario para presentar lo que más tarde consideraría su idea más importante: una propuesta sobre cómo el universo podría haber surgido de la nada.

La teoría del Big Bang tenía otros problemas. Los físicos entendían que un haz de energía en expansión se convertiría en un desorden arrugado en lugar del enorme y suave cosmos que observan los astrónomos modernos. En 1980, un año antes de la conferencia de Hawking, el cosmólogo Alan Guth se dio cuenta de que los problemas del Big Bang podían solucionarse con un añadido: un crecimiento inicial exponencial conocido como inflación cósmica, que habría hecho que el universo fuera enorme, liso y plano antes de que la gravedad tuviera la oportunidad de destrozarlo. La inflación se convirtió rápidamente en la principal teoría de nuestros orígenes cósmicos. Sin embargo, la cuestión de las condiciones iniciales seguía vigente: ¿Cuál fue el origen de la minúscula mancha que supuestamente se convirtió en nuestro cosmos y de la energía potencial que la infló?