Que es un golpe de calor

Golpe de calor vs. agotamiento por calor

La insolación, también conocida como golpe de sol, es un tipo de enfermedad grave por calor que da lugar a una temperatura corporal superior a 40,0 °C.[4] Otros síntomas son el enrojecimiento de la piel, el dolor de cabeza, los mareos y la confusión.[2] En la insolación clásica no suele haber sudoración, mientras que en la insolación por esfuerzo sí la hay. [El inicio de la insolación puede ser repentino o gradual[3]. La insolación es una afección potencialmente mortal que se caracteriza por una hipertermia grave y una disfunción multiorgánica derivada de la exposición al calor[6]. Las complicaciones médicas pueden incluir convulsiones, rabdomiólisis o insuficiencia renal[3].

El golpe de calor se produce a causa de las altas temperaturas externas o del esfuerzo físico[3][4] Algunas personas con ciertas condiciones de salud tienen un mayor riesgo de sufrir un golpe de calor. Suele producirse en caso de exposición prolongada a un calor ambiental extremo o de esfuerzo, lo cual es evitable en la mayoría de los individuos[6]. Sin embargo, los pacientes con ciertas predisposiciones genéticas que subyacen a una mayor susceptibilidad al golpe de calor son especialmente vulnerables a éste en condiciones relativamente leves, sobre todo entre la población pediátrica[7].

Cuánto dura el agotamiento por calor

Normalmente, el cuerpo se enfría sudando. Cuando hace calor, especialmente cuando hay mucha humedad, el sudor no es suficiente para refrescarse. Su temperatura corporal puede aumentar hasta niveles peligrosos y puede desarrollar una enfermedad por calor.

La mayoría de las enfermedades causadas por el calor se producen cuando se permanece demasiado tiempo al aire libre. Hacer ejercicio y trabajar al aire libre con mucho calor también puede provocar una enfermedad por calor. Los adultos mayores, los niños pequeños y las personas enfermas o con sobrepeso son los más expuestos. Tomar ciertos medicamentos o beber alcohol también puede aumentar el riesgo.

Causas de la insolación

La deshidratación puede ser una enfermedad grave relacionada con el calor. También es un peligroso efecto secundario de la diarrea, los vómitos y la fiebre. Los niños y las personas mayores de 60 años son especialmente susceptibles a la deshidratación.

En condiciones normales, todos perdemos agua corporal diariamente a través del sudor, las lágrimas, la respiración, la orina y las heces. En una persona sana, esta agua se repone bebiendo líquidos y comiendo alimentos que contienen agua. Cuando una persona enferma con fiebre, diarrea o vómitos, se produce la deshidratación. También ocurre si un individuo se expone demasiado al sol y no bebe suficiente agua. Se produce cuando el cuerpo pierde el contenido de agua y las sales corporales esenciales, como el sodio y el potasio.

Si se detecta a tiempo, la deshidratación suele poder tratarse en casa bajo la orientación de un profesional sanitario. En el caso de los niños, las instrucciones para la administración de alimentos y líquidos difieren según la causa de la deshidratación, por lo que es importante hablar con el profesional sanitario de su hijo.

En caso de deshidratación moderada, puede ser necesario administrar líquidos por vía intravenosa. Si se detecta a tiempo, una simple rehidratación puede ser eficaz. Los casos de deshidratación grave deben tratarse como una emergencia médica, y es necesario hospitalizarlo, junto con líquidos intravenosos. Hay que actuar de inmediato.

Síntomas de un golpe de calor

El sobreesfuerzo cuando hace calor, la exposición al sol o a los incendios forestales, y el ejercicio o el trabajo en zonas calurosas, mal ventiladas o confinadas pueden aumentar el riesgo de sufrir un golpe de calor. El calor también puede agravar una afección médica existente, por ejemplo una enfermedad cardíaca. Personas con mayor riesgo de padecer enfermedades relacionadas con el calor Cualquiera puede sufrir una enfermedad relacionada con el calor, pero las personas con mayor riesgo son: Las personas mayores son más propensas al estrés térmico que las más jóvenes porque su cuerpo puede no adaptarse bien a los cambios de temperatura repentinos o prolongados. También es más probable que padezcan una enfermedad crónica y que tomen medicamentos que puedan interferir en la capacidad del cuerpo para regular la temperatura. Causas del estrés térmico y de las enfermedades relacionadas con el calor Hay muchos factores que pueden causar estrés térmico y enfermedades relacionadas con el calor, entre ellos: Síntomas de las enfermedades relacionadas con el calor Es importante conocer los signos y síntomas de la exposición al calor y cómo debe responder. Los síntomas varían según el tipo de enfermedad relacionada con el calor. Los bebés y los niños pequeños pueden mostrar signos de inquietud o irritabilidad y tener menos pañales mojados. Las personas mayores pueden sentirse mareadas, confusas, débiles o desmayarse.