Muertos en venezuela 2019

Fuerzas de acción especial

(Washington, D.C.) – Una unidad policial venezolana ha estado llevando a cabo ejecuciones extrajudiciales y detenciones arbitrarias en comunidades pobres que ya no apoyan al gobierno de Nicolás Maduro, señaló hoy Human Rights Watch.

Desde la creación de la unidad Fuerza de Acciones Especiales (FAES) como una rama de la Policía Nacional Bolivariana en 2017, los policías de la unidad han cometido graves violaciones de derechos humanos con impunidad. Sus prácticas policiales abusivas en comunidades de bajos ingresos son consistentes con un patrón que Human Rights Watch y Provea, un grupo venezolano de derechos humanos, encontraron en 2016 de denuncias generalizadas de abusos por parte de las fuerzas de seguridad contra ciudadanos comunes durante lo que se conoció como la “Operación de Liberación y Protección del Pueblo” (OLP).

“En medio de una crisis económica y humanitaria que golpea con más fuerza a los pobres, las autoridades venezolanas están recurriendo a atroces abusos en comunidades de bajos ingresos que ya no apoyan al régimen de Maduro”, señaló José Miguel Vivanco, director para las Américas de Human Rights Watch. “En un país donde el sistema de justicia se utiliza para perseguir a los opositores en lugar de investigar los delitos, las fuerzas de seguridad venezolanas están tomando la justicia en sus propias manos, matando o deteniendo arbitrariamente a personas que dicen que han cometido delitos, sin mostrar ninguna prueba.”

Muertes por inanición en venezuela

Entre marzo y agosto de 2020, 287 presos murieron en cárceles y calabozos de la policía, lo que supone un aumento con respecto a los 137 que se produjeron durante el mismo periodo de tiempo en 2019, según los datos que InSight Crime ha estado recopilando sobre las muertes de reclusos en Venezuela. Los datos se basaron en cifras de dos organizaciones no gubernamentales de derechos de los presos con sede en Venezuela, Una Ventana a la Libertad (UVL) y el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP).

Aunque las autoridades venezolanas no han facilitado cifras sobre las muertes de reclusos por coronavirus en las prisiones ni el número de casos, Una Ventana a la Libertad contabilizó 109 casos de coronavirus en centros de detención policial de seis estados a principios de septiembre, según las cifras oficiales facilitadas a la organización. Ese total está muy por debajo del número de casos registrados en los sistemas penitenciarios de Perú y Colombia.  Estos países registraron 12.294 y 2.592 casos, respectivamente, en el mismo periodo de tiempo, aunque ambos tienen una población penitenciaria mayor que la de Venezuela.

Masacre en venezuela 2019

La delincuencia en Venezuela está muy extendida, y los delitos violentos, como el asesinato y el secuestro, aumentan cada año. En 2014, las Naciones Unidas atribuyeron la delincuencia al mal ambiente político y económico del país -que, en ese momento, tenía la segunda tasa de homicidios más alta del mundo-[1][2][3][4].

Los índices de criminalidad empezaron a aumentar rápidamente durante la presidencia de Hugo Chávez debido a la inestabilidad institucional de su gobierno bolivariano, a la falta de recursos policiales y a la grave desigualdad[5]. El gobierno de Chávez buscó una hegemonía cultural promoviendo el conflicto de clases y la fragmentación social, lo que a su vez alentó a las “bandas criminales a matar, secuestrar, robar y extorsionar”[6] Tras la muerte de Chávez en 2013, Venezuela fue clasificada como la nación más insegura del mundo por Gallup[1].

La delincuencia también ha seguido aumentando bajo el sucesor de Chávez, el presidente Nicolás Maduro, que continuó con las políticas de Chávez que alteraron el estatus socioeconómico de Venezuela[7][8][9][10] En 2015, la delincuencia, que solía ser el tema que más preocupaba a los venezolanos según las encuestas, era la segunda preocupación en comparación con la escasez en Venezuela. [11] Los delitos relacionados con la escasez y el hambre aumentaron poco después, con crecientes incidentes de saqueos en todo el país[4][12] La mayoría de los delitos en Venezuela permanecen impunes según la Fiscalía General de Venezuela, ya que el 98% de los delitos en Venezuela no dan lugar a un proceso judicial[13][14].

Estadísticas sobre la delincuencia en venezuela

La delincuencia en Venezuela está muy extendida, y los delitos violentos, como el asesinato y el secuestro, aumentan cada año. En 2014, las Naciones Unidas atribuyeron la delincuencia al mal ambiente político y económico del país, que en ese momento tenía la segunda tasa de homicidios más alta del mundo[1][2][3][4].

Los índices de criminalidad empezaron a aumentar rápidamente durante la presidencia de Hugo Chávez debido a la inestabilidad institucional de su gobierno bolivariano, a la falta de recursos policiales y a la grave desigualdad[5]. El gobierno de Chávez buscó una hegemonía cultural promoviendo el conflicto de clases y la fragmentación social, lo que a su vez alentó a las “bandas criminales a matar, secuestrar, robar y extorsionar”[6] Tras la muerte de Chávez en 2013, Venezuela fue clasificada como la nación más insegura del mundo por Gallup[1].

La delincuencia también ha seguido aumentando bajo el sucesor de Chávez, el presidente Nicolás Maduro, que continuó con las políticas de Chávez que alteraron la situación socioeconómica de Venezuela[7][8][9][10] En 2015, la delincuencia, que solía ser el tema que más preocupaba a los venezolanos según las encuestas, era el segundo l [11] Los delitos relacionados con la escasez y el hambre aumentaron poco después, con crecientes incidentes de saqueos en todo el país[4][12] La mayoría de los delitos en Venezuela permanecen impunes según la Fiscalía General de Venezuela, ya que el 98% de los delitos en Venezuela no dan lugar a un proceso judicial[13][14].