Aviones militares cubanos

Cuba mig-29

Cuando la Revolución Cubana derrocó al gobierno de Fulgencio Batista a finales de 1958, el nuevo gobierno dirigido por Fidel Castro heredó la mayoría de los aviones y equipos del antiguo régimen, que se complementaron con los aviones de la propia Fueza Aérea Rebelde de los revolucionarios,[a] para formar la nueva Fuerza Aérea Revolucionaria (FAR). La detención de gran parte del personal (incluidos 40 pilotos) de la antigua fuerza aérea hizo que las FAR carecieran de mano de obra para operar sus aviones, mientras que la falta de piezas de repuesto redujo aún más la eficiencia operativa y un embargo de armas inspirado por Estados Unidos restringió los esfuerzos para adquirir aviones de repuesto[4].

En abril de 1961, los exiliados cubanos apoyados por la CIA intentaron una invasión de Cuba con el objetivo de derrocar al gobierno de Castro. La invasión fue precedida el 17 de abril por ataques aéreos a los aeródromos cubanos en un intento de destruir las FAR antes de la invasión, siendo destruidos varios aviones de las FAR[5] Los aviones operativos restantes fueron desplegados contra el desembarco de los exiliados cubanos el 19 de abril, hundiendo un transporte, el Río Escondido y dañando gravemente otro, el Houston, que quedó varado, lo que supuso la pérdida de la mayor parte de los suministros del invasor[6].

El escalafón militar de cuba

Cuando la Revolución Cubana derrocó al gobierno de Fulgencio Batista a finales de 1958, el nuevo gobierno dirigido por Fidel Castro heredó la mayoría de los aviones y equipos del antiguo régimen, que se complementaron con los aviones de la propia Fueza Aérea Rebelde de los revolucionarios,[a] para formar la nueva Fuerza Aérea Revolucionaria (FAR). La detención de gran parte del personal (incluidos 40 pilotos) de la antigua fuerza aérea hizo que las FAR carecieran de mano de obra para operar sus aviones, mientras que la falta de piezas de repuesto redujo aún más la eficiencia operativa y un embargo de armas inspirado por Estados Unidos restringió los esfuerzos para adquirir aviones de repuesto[4].

En abril de 1961, los exiliados cubanos apoyados por la CIA intentaron una invasión de Cuba con el objetivo de derrocar al gobierno de Castro. La invasión fue precedida el 17 de abril por ataques aéreos a los aeródromos cubanos en un intento de destruir las FAR antes de la invasión, siendo destruidos varios aviones de las FAR[5] Los aviones operativos restantes fueron desplegados contra el desembarco de los exiliados cubanos el 19 de abril, hundiendo un transporte, el Río Escondido y dañando gravemente otro, el Houston, que quedó varado, lo que supuso la pérdida de la mayor parte de los suministros del invasor[6].

Fuerza militar cubana

Situada en el centro-sur de África, la República de Angola es una antigua colonia portuguesa. Fue una provincia portuguesa de ultramar desde el siglo XVI hasta que obtuvo la independencia el 1 de noviembre de 1975, tras el fin de una guerra contra el dominio colonial. Inmensamente rica en recursos minerales, Angola fue escenario de varias guerras civiles intensas y amargas en los 15 años anteriores a su independencia y durante casi 25 años después. Además de las guerras civiles, Angola fue objeto de varias intervenciones de Cuba y Sudáfrica.

Angola acudió a los soviéticos en busca de ayuda y adquirió un primer lote de cazas MiG, que fueron entregados a mediados de diciembre de 1975. Utilizando los MiGs adquiridos a los soviéticos en 1975, más los transportes dejados por los portugueses, los locales y los cuadros cubanos elaboraron un plan para crear la Força Aérea popular de angola – Defesa Anti-Aviones (FAPA-DAA, – Fuerza Aérea Popular de Angola y Fuerza de Defensa Aérea). Ésta se estableció oficialmente por decreto del primer presidente angoleño, el Dr. Agustín Neto, el 21 de enero de 1976, como una rama de la Força Armadas Populares de Libertaceio de Angola (FAPLA – militares angoleños).

Aviones militares de japón

Cuando la Revolución Cubana derrocó al gobierno de Fulgencio Batista a finales de 1958, el nuevo gobierno dirigido por Fidel Castro heredó la mayoría de los aviones y equipos del antiguo régimen, que se complementaron con los aviones de la propia Fueza Aérea Rebelde de los revolucionarios,[a] para formar la nueva Fuerza Aérea Revolucionaria (FAR). La detención de gran parte del personal (incluidos 40 pilotos) de la antigua fuerza aérea hizo que las FAR carecieran de mano de obra para operar sus aviones, mientras que la falta de piezas de repuesto redujo aún más la eficiencia operativa y un embargo de armas inspirado por Estados Unidos restringió los esfuerzos para adquirir aviones de repuesto[4].

En abril de 1961, los exiliados cubanos apoyados por la CIA intentaron una invasión de Cuba con el objetivo de derrocar al gobierno de Castro. La invasión fue precedida el 17 de abril por ataques aéreos a los aeródromos cubanos en un intento de destruir las FAR antes de la invasión, siendo destruidos varios aviones de las FAR[5] Los aviones operativos restantes fueron desplegados contra el desembarco de los exiliados cubanos el 19 de abril, hundiendo un transporte, el Río Escondido y dañando gravemente otro, el Houston, que quedó varado, lo que supuso la pérdida de la mayor parte de los suministros del invasor[6].