Porque pais vasco y navarra tienen concierto economico

Asedio a bilbao

Juntos, el partido nacionalista moderado vasco (PNV) y el partido de izquierda independentista Bildu (Unidos) tienen el 60% de los votos y el 64% de los escaños (48/75) en el Parlamento del País Vasco.

Navarra, que constituye una región administrativa separada pero que se encuentra en el núcleo de la patria vasca en la narrativa nacionalista, está ahora gobernada por una coalición formada por el partido pro vasco Geroa Bai (Sí al futuro), Bildu y la más bien pequeña Izquierda Unida española. El nacionalismo manda en las tres diputaciones forales, en las tres principales ciudades vascas, en Pamplona (la delicia de Hemingway y otros amantes de los San Fermines) y en la gran mayoría de los pueblos de la región.

Teniendo en cuenta el auge nacionalista en Cataluña y en otros lugares de Europa, ¿por qué el País Vasco parece tan tranquilo respecto a la independencia? Creo que se debe a tres factores principales, uno institucional, otro histórico y otro estratégico, y que hay un hilo conductor en los tres: la crisis económica.

Concierto económico vasco

El Concierto Económico (euskera: kontzertu ekonomikoa, español: Concierto económico) es un instrumento jurídico que regula las relaciones fiscales y financieras entre la Administración General del Reino de España y la Comunidad Autónoma del País Vasco.

El origen del Concierto Económico estuvo en la derrota de la Tercera Guerra Carlista de 1876, con 40.000 tropas españolas ocupando las Provincias Vascas, y sometidas a la ley marcial. [1] Era necesario llegar a algún tipo de acuerdo por el que las Provincias Vascas (Álava, Gipuzkoa y Vizcaya) pagasen impuestos al Estado tras la aprobación de la Ley de 21 de julio de 1876, que obligaba a los ciudadanos de “estas provincias a pagar impuestos según sus posibilidades, de la misma manera que los demás españoles”, tal y como ponía la ley de abolición de los fueros impulsada por el premier español Canovas del Castillo.

El proceso de discusión de esta obligación fue muy complejo, debido a que estas provincias tenían hasta entonces su propia jurisdicción, sus estatutos territoriales y sus propios órganos de representación política (las Juntas Generales o “Asambleas Representativas”), que regulaban sus propios sistemas fiscales internos, según sus Fueros. [Tras infructuosos contactos entre Antonio Cánovas del Castillo, Presidente del Gobierno, y los representantes de las Diputaciones Forales, el primero disolvió las Juntas Generales y la Diputación de Vizcaya. Entre finales de noviembre y principios de diciembre de 1877, hizo lo mismo con las Diputaciones Forales de Álava y Gipuzkoa[3].

Concierto vasco

En términos históricos, la palabra Fuero suele referirse a los fueros fundacionales de ciudades y burgos. Estos fueros estaban destinados a concentrar a las familias en lugares concretos y solían incluir una serie de privilegios y exenciones. Pero en el caso de las provincias vascas y de Navarra, el término Fueros no se refiere a las dispensas locales, sino a una serie de leyes generales que estos territorios se autoimpusieron en una época en la que gozaban de un amplio grado de autonomía. Estos Fueros consistían en un conjunto de ordenanzas de derecho público y privado que regulaban la forma de administrar las Provincias Vascongadas y Navarra.

Los Fueros se configuraron como un cuerpo legal que surgía de una serie de costumbres y prácticas habituales que eran, a su vez, el reflejo de una determinada forma de pensar y sentir. Quizá uno de los rasgos más distintivos del conjunto de los Fueros sea su flexibilidad ante las cambiantes condiciones sociales. Como dijo un experto: “Un fuero no es algo que aparezca de repente, como una nueva constitución, sino que es algo que se va conformando poco a poco, que se fundamenta en la propia historia. Así que las fórmulas forales [el adjetivo deriva de fuero] no pueden descartarse por inadecuadas; se forman continuamente, se renuevan constantemente y no pretenden basar su justificación última en las formulaciones precedentes. Así que cada formulación es un hito más en el camino hacia su culminación final”.

Tercera guerra carlista

IntroducciónEl País Vasco (capital regional: Vitoria-Gasteiz) está situado en el norte de España. Limita al oeste con Cantabria y la provincia de Burgos, al norte con el mar Cantábrico, al este con Francia y Navarra y al sur con La Rioja (río Ebro). Está formada por tres provincias (llamadas provincias en el sistema autonómico): Araba, Gipuzkoa y Bizkaia, que agrupan 251 municipios. Tiene una superficie de 7.230 km2 y registra 2.177.880 habitantes en 2019 (el 4,6% de la población nacional), con una densidad de población bastante elevada, en torno a 300 personas/km2. El País Vasco es actualmente una de las regiones más ricas de España (Eurostat, 2020). Cuenta con una sólida base industrial, que abarca la industria del automóvil, la aeronáutica, la energía, el medio ambiente, el diseño industrial, la maquinaria y la ingeniería, entre otros.

La economía del País Vasco está fuertemente basada en la industria manufacturera desde principios del siglo XX. En 2017, la industria manufacturera representa el 25,7% del PIB total (18.366 millones de euros). Sin embargo, la crisis económica de 2008 ha tenido un importante impacto negativo en las actividades manufactureras de la región, provocando un cambio estructural en las cuotas mencionadas.