Los niños de murillo

La inmaculada concepción de los venerablespintura de bartolomé esteban murillo

El joven mendigo es un cuadro de género (hacia 1645-1650) del pintor español Bartolomé Esteban Murillo. Conocido también como El niño piojoso, por la figura de un joven que se despioja en el cuadro, El joven mendigo es la primera representación conocida de un mendigo callejero realizada por Murillo[1].

Está influenciado por la pobreza de los niños españoles en el siglo XVII y sigue el estilo de Michelangelo Merisi da Caravaggio[2]. El cuadro de Murillo se centra en un niño huérfano y utiliza una técnica complementaria de luces y sombras[3]. Se ha considerado una de sus obras más populares del Barroco español y en su día se conservó en la colección real de Luis XVI[4].

Como uno de los últimos grandes pintores del Siglo de Oro español, Murillo fue sobre todo un pintor religioso, conocido por sus grandes representaciones de santos y de Cristo. Su interés por los pobres está quizá relacionado con la doctrina de la caridad de los franciscanos, para los que trabajó con frecuencia. Para los franciscanos de Sevilla pintó un ciclo de cuadros al que pertenece otro cuadro titulado La cocina de los ángeles[6].

Murillo en español

El joven mendigo es un cuadro de género (hacia 1645-1650) del pintor español Bartolomé Esteban Murillo. Conocido también como El niño piojoso, por la figura de un joven que se despioja en el cuadro, El joven mendigo es la primera representación conocida de un mendigo callejero realizada por Murillo[1].

Está influenciado por la pobreza de los niños españoles en el siglo XVII y sigue el estilo de Michelangelo Merisi da Caravaggio[2]. El cuadro de Murillo se centra en un niño huérfano y utiliza una técnica complementaria de luces y sombras[3]. Se ha considerado una de sus obras más populares del Barroco español y en su día se conservó en la colección real de Luis XVI[4].

Como uno de los últimos grandes pintores del Siglo de Oro español, Murillo fue sobre todo un pintor religioso, conocido por sus grandes representaciones de santos y de Cristo. Su interés por los pobres está quizá relacionado con la doctrina de la caridad de los franciscanos, para los que trabajó con frecuencia. Para los franciscanos de Sevilla pintó un ciclo de cuadros al que pertenece otro cuadro titulado La cocina de los ángeles[6].

Dr. murillo

Título:La Virgen con el Niño, de MurilloArtista/Fabricante:Caldesi & Montecchi (británicos, activos en la década de 1850)Cultura:BritánicaLugar:Londres, Inglaterra (Lugar de creación)Fecha:1858Medio:Impresión en plata alúminaNúmero de objeto:84.XB.582.1.25Dimensiones:26,1 × 18,3 cm (10 1/4 × 7 3/16 in.)Inscripción(es):(Recto, montaje) abajo a la izquierda, impreso en tinta negra: “Nº [“o” en superíndice] 25″;

En el centro inferior, impreso en tinta negra: “Caldesi & Montecchi, Foto: / LA VIRGEN Y EL NIÑO, DE MURILLO. / en la colección de Lord Overstone. / Londres, publicado en mayo de 1857, por P.&D. Colnaghi & Co. [“o” en superíndice] 13 y 14, Pall Mall East & T. Agnew & Sons, Manchester. / para [sic] los propietarios”;Departamento:FotografíasClasificación:FotografíasTipo de objeto:Impreso

Descripción del objetoFotografía de la “Virgen con el Niño”, una pintura de Bartolomé Estebán Murillo. El cuadro representa a la Virgen María sentada en un banco y sosteniendo al Niño con su mano izquierda, mientras éste alcanza la cima de su madre.

Murillo artista

El joven mendigo es un cuadro de género (hacia 1645-1650) del pintor español Bartolomé Esteban Murillo. Conocido también como El niño piojoso, por la figura de un joven que se despioja en el cuadro, El joven mendigo es la primera representación conocida de un mendigo callejero realizada por Murillo[1].

Está influenciado por la pobreza de los niños españoles en el siglo XVII y sigue el estilo de Michelangelo Merisi da Caravaggio[2]. El cuadro de Murillo se centra en un niño huérfano y utiliza una técnica complementaria de luces y sombras[3]. Se ha considerado una de sus obras más populares del Barroco español y en su día se conservó en la colección real de Luis XVI[4].

Como uno de los últimos grandes pintores del Siglo de Oro español, Murillo fue sobre todo un pintor religioso, conocido por sus grandes representaciones de santos y de Cristo. Su interés por los pobres está quizá relacionado con la doctrina de la caridad de los franciscanos, para los que trabajó con frecuencia. Para los franciscanos de Sevilla pintó un ciclo de cuadros al que pertenece otro cuadro titulado La cocina de los ángeles[6].