Jeanantoine watteau

Thomas gainsboro…

Watteau nació en la ciudad flamenca de Valenciennes, que acababa de ser anexionada por el rey francés Luis XIV. Su padre era un maestro albañil de ascendencia flamenca. Al mostrar un temprano interés por la pintura, fue aprendiz de Jacques-Albert Gérin, un pintor local. Al no poder aprender de Gérin, Watteau se marchó a París hacia 1702. Allí encontró empleo en un taller de Pont Notre-Dame, realizando copias de pinturas de género populares de tradición flamenca y holandesa; fue en ese periodo cuando desarrolló su característica técnica de boceto.

Datos de jean-antoine watteau

Jean-Antoine Watteau[n. 1] nació en octubre de 1684[n. 2] en Valenciennes,[1] antaño una importante ciudad del condado de Hainaut que pasó a formar parte de los Países Bajos de Borgoña y de los Habsburgo hasta su secesión a Francia tras la guerra franco-holandesa. Era el segundo de los cuatro hijos de Jean-Philippe Watteau (1660-1720) y Michelle Lardenois (1653-1727),[n. 3] y se supone que era de ascendencia valona[n. 4] Los Watteau eran una familia bastante acomodada, aunque se dice que Jean-Philippe, techador en la segunda generación, era dado a las peleas. [n. 5] Con un temprano interés por la pintura, Jean-Antoine podría haber sido aprendiz de Jacques-Albert Gérin,[19] un pintor local, y sus primeros temas artísticos fueron charlatanes que vendían remedios de charlatán en las calles de Valenciennes. [En 1702, Watteau marchó a París[20] y, tras un periodo como pintor de escenas y con una salud precaria, se empleó en un taller de Pont Notre-Dame, realizando copias de cuadros de género populares de tradición flamenca y holandesa;[n. 6] fue en ese periodo cuando desarrolló su característica técnica de boceto[21].

Pierrot (cuadro)

El presente lienzo está pintado en formato oval. Perteneció a uno de los biógrafos de Watteau, Jean de Jullienne, en cuya colección se encontraba en 1729. De ahí pasó a ser propiedad del príncipe Conti, también en París. Tras su venta en 1787, el lienzo apareció en el Reino Unido en Petworth House, en las colecciones Egremont y Leconfield. A mediados del siglo XX se encontraba en Estados Unidos, donde pertenecía a Duveen. El lienzo fue finalmente adquirido para la colección Thyssen-Bornemisza en 1975.

Formaba pareja con otro titulado El desfile, obra ya perdida y conocida a través de grabados. El Descanso es un buen ejemplo del espíritu con el que Watteau dotó a estas pequeñas obras. El elemento militar queda relegado al fondo, a la derecha, donde vemos carros de abastecimiento y un gran caldero sobre el fuego. Los soldados descansan alrededor de dos grandes árboles que dividen el espacio y se disponen en pequeños grupos que articulan el primer plano. En esta zona, en medio de un campamento provisional, Watteau sitúa a dos mujeres finamente vestidas, una de las cuales levanta sus faldas de forma coqueta para no ensuciar la parte inferior de su vestido en el barro. Las dos mujeres, que parecen alejadas de la acción que las rodea, parecen hablar entre ellas, observadas por un par de soldados, uno de ellos herido en la cabeza y en el brazo. Watteau añade otras dos figuras, también ajenas al mundo militar, en forma de una joven madre y su hijo que también aprovechan la sombra de los grandes árboles para descansar.

Cómo murió jean-antoine watteau

Jean-Antoine Watteau[n. 1] nació en octubre de 1684[n. 2] en Valenciennes,[1] antaño una importante ciudad del condado de Hainaut que pasó a formar parte de los Países Bajos de Borgoña y de los Habsburgo hasta su secesión a Francia tras la guerra franco-holandesa. Era el segundo de los cuatro hijos de Jean-Philippe Watteau (1660-1720) y Michelle Lardenois (1653-1727),[n. 3] y se supone que era de ascendencia valona[n. 4] Los Watteau eran una familia bastante acomodada, aunque se dice que Jean-Philippe, techador en la segunda generación, era dado a las peleas. [n. 5] Con un temprano interés por la pintura, Jean-Antoine podría haber sido aprendiz de Jacques-Albert Gérin,[19] un pintor local, y sus primeros temas artísticos fueron charlatanes que vendían remedios de charlatán en las calles de Valenciennes. [En 1702, Watteau marchó a París[20] y, tras un periodo como pintor de escenas y con una salud precaria, se empleó en un taller de Pont Notre-Dame, realizando copias de cuadros de género populares de tradición flamenca y holandesa;[n. 6] fue en ese periodo cuando desarrolló su característica técnica de boceto[21].